La evaluación heurística es una técnica que se inscribe, dentro de un proceso de diseño centrado en el usuario, en la fase de evaluación.
Se puede llevar a cabo durante el proceso de diseño, una vez que se han elaborado las primeras propuestas y se han construido los primeros prototipos del sistema, puesto que esto permitirá corregir aspectos de usabilidad antes de desarrollarlo completamente. También se puede hacer en la etapa de lanzamiento, una vez desarrollado, para diagnosticar elementos de usabilidad que no eran visibles en etapas previas.
En el caso de proyectos de rediseño (en los que se parte de un proyecto preexistente), es muy recomendable realizar la evaluación heurística al inicio del proyecto sobre el diseño del que se parte, puesto que los resultados ayudarán a definir algunas pautas de la nueva propuesta.